viernes, 30 de marzo de 2007

Herejía...

Estaba leyendo el otro día el libro "She's a bad motorcycle. Writers on riding", una recopilación de diversos escritos sobre/alrededor de la moto de escritores yanquis bastante interesante. Tiene artículos de Hunter S. Thomson (un fragmento de su célebre libro sobre los Hell's), Horace McCoy ("¿Acaso no matan a los caballos?") en un cuento interesante sobre corredores de dirt-track, un escrito de Eric Burdon sobre Steve McQueen, etc. (haré en su momento un artículo sobre el libro).

Pero lo que más me soprendió fue un artículo de Sonny Barger, el celebérrimo presidente de los Hell's Angels de San Francisco y uno de los que más ha explotado el cuento de los moteros salvajes con libros, conferencias, películas, etc.








Me esperaba lo peor, porque ya había leído un libro suyo ("Riding High, Living Free"), una recopilación de relatos de moteros que era una soberbia chuminada, pero en este caso habla de sus experiencias con las Harleys: cómo tuvo la primera, las modificaciones que les hacían y demás cosas, algunas de ellas bastante técnicas sobre todo para uno, que apenas distingo el tapón donde se pone la gasolina del que se echa el aceite.




Pero de pronto el tío va y dice (cito de memoria).
"La verdad es que las Harleys son un coñazo. A mí me gustaría mucho más tener una Paneuropean o una BMW. Quizás hace algunos años los Hells podríamos haber cambiado a las japonesas, que son mejores motos aunque con menos personalidad, pero ahora estamos atrapados en nuestra imagen y ya no podemos cambiar".
AAAAAAAAARRRRRGGGGGHHHHHH!!!!, HEREJÍA, BLASFEMIA, VADE RETRO, ESPANTO...

Se ve que con los años todos nos:

- hacemos razonables
- ablandamos
- reconocemos nuestros errores
- chocheamos
(táchese lo que crea que no corresponda).

Sonny Barger cuando todavía era un hombre y no una madikita probmw y ge-pe-ese.

Si este texto circulara entre todos los jarlistas a más de uno le daría un ataque, porque nunca he conocido a tíos tan "marquistas", fanáticos, acérrimos defensores de sus "hierros" que los que llevan las motos de Milwakee -quitando quizás a los ducatistas que son también otros integristas pero de distinto pelo-. Y eso que hoy en día las jarlis están mejor hechas y ya no pierden aceite, pero supongo que la imagen es la imagen.

Que nadie me interprete mal, me caen bien los harlistas y los customeros en general, pero a mí personalmente son motos que no me dicen nada. Y no entiendo que se sacrifiquen prestaciones, agilidad, comodidad, buen mantenimiento, precio y facilidad de uso sólo por una cuestión de IMAGEN. Todos los moteros somos algo pijos, pero eso me parece un exceso.
Bueno, también es verdad que sería difícil imaginar a los Angeles del Infierno montados en una BMW (aunque cosas más raras se han visto).



¿La BMW 1200 la quiere con puños calefactables?

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