Como buen escutero de origen, siempre había sentido una mezcla de respeto, miedo e incomprensión hacia las deportivas. Hasta hace un par de días... cuando mi vida cambió, cual invitado de "Sorpresa, sorpresa"
El sábado Lito me hace una proposición deshonesta: me propone intercambiar las motos durante unos kilómetros, ya que anda pensando comprarse una trail como la mía. Al principio se me ponen de corbata: la suya es una Suzuki TL1000R, una deportiva bicilíndrica que se dejó de fabricar en el 2003. Su motor lo lleva ahora la VStrom 1000 (casualmente) y me habían dicho que era un bicho de cuidado, un widow maker. 135 caballos uno detrás de otro. La leshe. Y luego es bastante grande (y pesada) comparada con las deportivas de hoy, con lo que a un bigardo como yo no le va tan incómoda.
Me subo y en cuanto me acostumbro a subir las patas hasta el culo todo va bien, primero me da la impresion de que me voy a caer por encima del manillar, al ir tan inclinado hacia adelante, luego que me van a reventar las muñecas, pero pronto me acostumbro.
El motor es un bi en estado puro, es decir, con una entrega de par bastante buena y regular y unas retenciones del carajo, con lo que casi no hay que tocar los frenos. En cuanto salimos a la carretera no me lo puedo creer. Como empuja, como tira, como suena, como todo. UUUUUUAAAAAAUUUUUUU, vrooooooooooommmmmm.... Entra en las curvas sin inmutarse, sale disparada, la entrega de potencia es regulable y me siento, curiosamente, mucho más seguro que con la mía, que al ser tan alta es un poco cabezona en las curvas (bueno, eso y me parece que necesita ajustar las suspensiones con urgencia).
Vaya tela. En la autovía le retuerzo un poco la oreja y dejo atrás a los otros, como una exhalación. y sin pasar de cuarta!
Más tarde se produce el siguiente diálogo:
YO: Creo que en la autovía me puse a más de 160 (no me atrevía a mirar el velocímetro, la verdad).
LITO: Y una polla! A 160 iba yo con la tuya, y me quitaste las pegatinas pero bien.
YO: Glups... (onomatopeya de tragar saliva acojonao).
Mi vida ha cambiado, quiero una de estas para rutear los domingoooosss, dios, que pasada!! Sería como tener dos mujeres, tu esposa fiel, cariñosa y leal en casa y una rubia tetona guarra con la que te acuestas cuando te lo pide el cuerpo.
Me bajé con las cervicales y las muñecas doloridas pero con una sonrisa de oreja a oreja. Se la pedí de nuevo a Lito pero pasó de mí, le dije que si algún día la vendía que me avisara primero (y espero que también pase de mí).
Supongo que me calmaré, pero me he pasado dos dias mirando anuncios de bicilíndricas de segunda mano, Honda VTR, Aprilia RSV Mille, Aprilia Falco, BMW R1100S y cada vez más enmelonao.
Por suerte para mi integridad física y para los puntos de mi carnet, no tengo pasta ahora para darme ese capricho (debería costarme no más de 4000 lereles y con eso las que ofertan tienen más de 50.000 kms, que en una deportiva pueden ser demasiados), porque si no, pa qué contarte.
Supongo que se me pasará el enmelone pronto, como se me pasó el que me dió hace algunos meses por comprarme una Royal Enfield hecha en la India.
Que horror, estoy perdiéndome en el lado oscuroooo... Me llamaaaaa... me llamaaaa....
No hay comentarios:
Publicar un comentario